La lesión de Jesús Orozco Chiquete ha evolucionado en gravedad


La lesión de Jesús Orozco Chiquete ha evolucionado en gravedad, generando mucha preocupación tanto en Cruz Azul como en la Selección Mexicana de cara a la Copa Mundial 2026. Durante el partido de semifinales contra Tigres, Chiquete sufrió una torcedura en el tobillo derecho, inicialmente valorada pero que ahora se teme que sea más grave de lo que se pensaba.

El periodista Adrián Esparza (TUDN) informó que, tras el golpe, las primeras evaluaciones sugieren dos posibles escenarios para la lesión:

✅ Escenario 1: Una lesión leve sin daño significativo en los ligamentos. En este caso, su recuperación tomaría de 3 a 4 meses, lo que permitiría que regresara al final del torneo Clausura 2026.

✅ Escenario 2: Un daño más serio, como un desgarro ligamentoso o lesión en tendones. Esto implicaría una baja de 6 meses o más, prácticamente descartándolo para el Mundial 2026, un evento al que Jesús aspira participar con México.

Este golpe ocurrió tras una disputa por la pelota en el encuentro contra Tigres, que obligó a la atención médica inmediata y llevó a que el jugador fuera retirado del campo entre aplausos por parte de la afición.

Jesús Orozco, con 189 cm de estatura y conocido por su sólido rendimiento defensivo, fue uno de los jugadores más utilizados por Nicolás Larcamón durante el torneo, acumulando 934 minutos jugados. Su ausencia representa un golpe fuerte para Cruz Azul, que también perdió otro jugador clave, debilitando la estructura defensiva y emocional del equipo en un torneo internacional como la Copa Intercontinental, en la cual el equipo estará sin Chiquete.

Mientras sus compañeros están en Catar para el partido contra Flamengo, Jesús se quedó en México enfocándose en su recuperación, lo que subraya la gravedad del momento para el club y la selección.

Más allá del impacto en Cruz Azul, la lesión pone en duda su participación en la C